La Balanza

La Balanza

31 de octubre de 2009

UNA NUEVA BERDAD!



Al asistir a la inauguración de las segundas jornadas de Derecho civil, escuché palabras que buscaba desde aquel 4 de marzo de 2007 en que crucé por primera vez las aulas "A" y "B", que daban al patio de la facultad. Ramiro Mendoza ex-docente de nuestra casa de estudios y actual Contralor General de la República logró captar mi atención pues se refirió al actual momento que vivimos en el tema educacional.

Yo como actor en la revolución pingüina de aquel memorable 2006, escuché por primera vez a una autoridad, y por cierto, académico referirse al tema desde otro punto de vista, algo más elevado, como es de esperar. Evidenció la crisis de valores que vivimos y el despertar de una generación de alumnos y profesores que desean promover el cambio, no sólo desde la sala de los liceos y escuelas, sino que también desde las aulas.

Habló del compromiso que deben tener los agentes sociales, ¿Y que agente social más instruido para para defender los derechos y valores que esta sociedad perdió, que los abogados?
Las Facultades de ciencias jurídicas al parecen lo olvidaron,
Los dueños de las nuevas grandes empresas del comercio de la educación; intentan esconder lo que queda del tema, temen perder al parecer su gallina con huevos de rubí.

Permitimos lucrar con la enseñanza, la salud, la seguridad, y por que no decirlo lucrar con los valores que esta sociedad necesidad urgentemente, cual penicilina era vital para mejorar al enfermo.

En esta sociedad donde se permite que los medios de información puedan hacer y deshacer con la verdad, dicen que una imagen vale más que mil palabras, pero aquellos escépticos leen los periódicos buscando verdad, escuchan la radio, pero encuentran lo mismo, una verdad modificada, esa promoción como valor intrínseco de nuestra sociedad, poseer bienes.

Parece que eso de la superación personal, el gran lema de un liberal, termina donde comienza la usura.
No vamos a detener nuestra superación hasta obtener todo aquello que se tranza en el mercado, hemos legitimado destruir toda mínima posibilidad de superación del otro, para poder llegar a casa satisfecho con nuestra condición de vida.

Es esa linda televisión, en conjunto con las nuevas redes sociales que nos ofrece el Internet y la última aplicación para el "iphone", son lo que constituye una nueva verdad:
"Una nueva y más cómoda forma de adquirir para vivir".





¿CUANTO MÁS TENDRÁ QUE PASAR PARA QUE DESPIERTES?
¿HASTA CUANDO PRETENDES ESPERAR LA LLEGADA DE UN SALVADOR, PARA PARTICIPAR EN POLÍTICA?

¿CUANTOS MÁS DEBERÁN SACRIFICARSE PARA QUE TE UNAS A LA DEFENSA DE LOS REALES DERECHOS? no los que está en el manual que tanto ofreces para enseñar, sino esos que la gente realmente necesita que se respeten.


Me despido con palabras del gran filósofo Inmanuel Kant en su historia de la filsofía:

"La ilustración es la salida del hombre de su minoría de edad. El mismo es culpable de ella. La minoría de edad estriba en la incapacidad de servirse del propio entendimiento, sin la dirección de otro. Uno mismo es culpable de esta minoría de edad cuando la causa de ella no yace en un defecto del entendimiento, sino en la falta de decisión y ánimo para servirse con independencia de él, sin la conducción de otro. ¡Sapere aude! ¡Ten valor de servirte de tu propio entendimiento! He aquí la divisa de la ilustración. La mayoría de los hombres, a pesar de que la naturaleza los ha librado desde tiempo atrás de conducción ajena (naturaliter maiorennes), permanecen con gusto bajo ella a lo largo de la vida, debido a la pereza y la cobardía. Por eso les es muy fácil a los otros erigirse en tutores. ¡Es tan cómodo ser menor de edad! Si tengo un libro que piensa por mí, un pastor que reemplaza mi conciencia moral, un médico que juzga acerca de mi dieta, y así sucesivamente, no necesitaré del propio esfuerzo. Con sólo poder pagar, no tengo necesidad de pensar: otro tomará mi puesto en tan fastidiosa tarea. Como la mayoría de los hombres (y entre ellos la totalidad del bello sexo) tienen por muy peligroso el paso a la mayoría de edad, fuera de ser penoso, aquellos tutores ya se han cuidado muy amablemente de tomar sobre sí semejante superintendencia. Después de haber atontado sus reses domesticadas, de modo que estas pacíficas criaturas no osan dar un solo paso fuera de las andaderas en que están metidas, les mostraron el riesgo que las amenaza si intentan marchar solas. Lo cierto es que ese riesgo no es tan grande, pues después de algunas caídas habrían aprendido a caminar; pero los ejemplos de esos accidentes por lo común producen timidez y espanto, y alejan todo ulterior intento de rehacer semejante experiencia."


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El reciente comentario fue asesorado por:

La vaca Flavia;
El esclavo Estico; y
El juez Ticio.

En su gran y único fundo Corneliano

Don Salvador Mohor

Don Salvador Mohor
invocando al estado como ente coactivo!

Escalofriante

Escalofriante
Justicia + Coacción, avalados por el poder del dinero

porque el Derecho siempre es injusto con el alumno!